
La producción en invernadero de flores de corte es el sector más importante de la floricultura holandesa.
Países Bajos tiene un territorio muy pequeño: apenas 42.000 kilómetros cuadrados. Sin embargo, maneja el 60% del comercio mundial de flores. La variedad más importante de este país es la rosa, tanto en superficie cultivada como en exportación, aunque debemos reconocer que todos relacionamos a Países Bajos con sus impresionantes campos sembrados de tulipanes y narcisos.
Países Bajos es un país líder mundial en el cultivo de tulipanes, y de allí proceden la mayoría de los bulbos que se plantan en Europa y en Norteamérica. La exportación de bulbos y el cultivo de las flores, en sus diferentes especies, son uno de los puntales económicos del país y, además, es uno de sus atractivos turísticos más identitarios.
Hay dos grandes zonas donde se concentran la mayor parte de los campos de tulipanes de Holanda. Por una parte, en el pólder (terreno pantanoso que se gana al mar por medio de la construcción de diques y que una vez desecado se dedica al cultivo) Noordoostpolder, en la provincia de Flevoland. Por otra parte, cerca de la costa occidental, en toda la zona entre la ciudad de Haarlem y hacia el norte de la provincia de Noord Holland, hasta Alkmaar.

En Flevoland se encuentra la Ruta del Tulipán, considerada uno de los itinerarios más bonitos del mundo. Es una ruta de más de 100 kilómetros que recorre unas 2.000 hectáreas de campos de flores rojas, amarillas o moradas.
En cuanto a las condiciones climáticas, las primaveras suaves y con noches frías hacen de Países Bajos el lugar perfecto para cultivar tulipanes. La tierra de los pólderes se drena constantemente, creando las condiciones ideales para los bulbos de tulipán, que necesitan suelo húmedo, pero bien drenado.

De hecho, esta cultura floral empezó ya en el siglo XVI, cuando los habitantes de la región comenzaron a cavar dunas, ya que necesitaban la arena para ampliar sus ciudades y vías. La tierra que quedó al descubierto resultó ser perfecta para el cultivo de tulipanes, narcisos y jacintos. El suave clima oceánico también fue idóneo para el cultivo de bulbos, que se disparó en el siglo XIX.
Tecnologías aplicadas a la floricultura
El suelo agrícola que posee Países Bajos, es muy limitado en cantidad y calidad debido a su alto contenido de arena, por lo que los agricultores neerlandeses han tenido que ser innovadores en la búsqueda de nuevas “zonas” para poder obtener cultivos de flores y hortalizas.
Países Bajos, además es líder internacional en horticultura, ya que ha creado soluciones sustentables en el sector hortícola a nivel mundial, desde invernaderos de última generación hasta nuevas variedades de plantas. Actualmente los campos agrícolas holandeses están cubiertos de modernos invernaderos de alta tecnología (Hi-Tech), climatización y tecnología eficiente para el manejo de agua y la nutrición de hortalizas, frutas y flores.
Un ejemplo de este trabajo que se da en el sector de las flores de bulbo, es el cultivo de tulipanes en varios niveles. Se trata de cultivar en invernadero con las plantas en múltiples hileras verticales, para incrementar la producción sin necesidad de ampliar la superficie del invernadero.
En este tipo de agricultura inteligente existe un sistema automático de transporte que mueve los tulipanes y otras plantas de un nivel al otro. Los tulipanes crecen parcialmente en la oscuridad, parcialmente con iluminación LED y parcialmente a la luz del sol. Utilizando la iluminación más adecuada, en cada nivel, se obtiene la mejor calidad de tulipanes con costes de energía reducidos, y, por tanto, se optimiza el valor económico.
Plantas más sanas con la agricultura de precisión
Para tener éxito en sus cultivos y de manera sostenible, un claro ejemplo de estos avances, es el uso de drones que vuelan por los invernaderos para detectar enfermedades de las plantas y buscar malas hierbas entre los lirios y tulipanes.
Las enfermedades, plagas y malezas son las causas más comunes de pérdida de plantas en cultivos intensivos de invernaderos. Para proteger la salud de las plantas, los agricultores deben controlar diariamente sus cultivos, lo que en la mayoría de los casos se transforma en una labor costosa y no siempre del todo efectiva.
Tratamiento de malas hierbas de precisión
Gracias a la agricultura digital es fácil descubrir malas hierbas entre los cultivos utilizando las imágenes que proporcionan los drones, convirtiendo esta información en un mapa de trabajo para que otras máquinas pueden ocuparse de actuar contra la mala hierba aplicando el herbicida solo donde es necesario.
Sudamérica, un productor cada vez más fuerte
Uno de los países sudamericanos que más ha crecido en el último tiempo es Brasil, logrando crear un paraíso de la floricultura llamado Holambra (por la fusión de “Holanda” y “Brasil”), un municipio del estado de San Pablo con unos 13.000 habitantes.
“Holambra” es el mayor polo productor de flores de América, a pesar de que se ubica en una región muy calurosa, con condiciones completamente distintas a las del Mar del Norte.
Otro caso de éxito es Colombia, quienes también han avanzado mucho en el mercado floricultor y gracias a su clima benigno en regiones frescas de las montañas, ofrecen al mundo su principal producto, las alstroemerias o también conocida como el lirio de los Incas.